Por ejemplo: Anímate, todo saldrá bien. Por otra parte, cuando una oración imperativa está expresada por la negatividad, el modo verbal que se utiliza es el subjuntivo. Por ejemplo: No comas tan rápido. Las oraciones imperativas, además, pueden llevar signos de exclamación, lo que aumenta su valor expresivo. Por ejemplo: ¡Ven aquí!
Peržiūrėti saugomą versiją